En la película “El secreto de Vera Drake”, Vera es una mujer que ayuda a abortar a chicas jóvenes. Suele emplear una solución jabonosa ( a la que añade otros componentes) que inyecta con una pera de goma y un tubito flexible a través de la vagina, penetrando el líquido en el útero y causando la muerte y el desprendimiento del embrión. Ella misma le dice a las chicas que sangrarán durante un par de días, expulsando los restos. Una de las chicas a las que les practica un aborto sufre un cuadro de abdomen agudo y es ingresada en el hospital, iniciándose allí la investigación de lo sucedido.
Al inyectar la solución jabonosa también se introduce aire en la cavidad uterina. El líquido empleado es un cáustico que provoca la corrosión de la cavidad uterina (una “quemadura”), afectando a la unión del saco amniótico a ella, así como la muerte instantánea del embrión por intoxicación y asfixia al no recibir más nutrientes de la placenta. Ésta se desprende de manera brusca y se originan desgarros en la pared uterina, con penetración de aire en las venas, necrosis e infección local. Se producen así una embolia gaseosa y un aborto séptico.
La embolia gaseosa es la introducción de aire en el torrente sanguíneo, formándose émbolos gaseosos ( “tapones” de aire) que bloquean arterias o venas de mayor o menor calibre. En caso de bloquearse arterias, el peligro es mayor porque se detiene el paso de nutrientes y oxígeno a las zonas irrigadas por ellas, con el consiguiente infarto y necrosis de la zona. Según la región afectada, la sintomatología será distinta, pudiendo afectar al cerebro, el corazón o los pulmones. Se necesitan 50 cc de aire para provocar la muerte de una persona por embolia gaseosa.
El aborto séptico es, coloquialmente, la “infección del aborto”. Ocurre cuando no se elimina todo el tejido embrionario o placentario, quedando restos en el interior que se necrosan e infectan. En este caso no se eliminan de manera rápida ni efectiva el embrión ni el saco amniótico, siendo eliminados paulatinamente tal como Vera le describe a la chica.
En la película la joven no llega a tiempo al hospital para salvar la vida. La combinación de la embolia gaseosa con la sepsis hace imposible que sobreviva a un aborto mal realizado y en malas condiciones.